Aunque he perdido a mi compañero, me sostiene el amor de mis hijos y nietos y la calidez de la amistad, no la que se declama, sino aquella que se muestra en el día a día al compartir alegrías y tristezas, superando distancias y conservando siempre, a pesar de vientos y tormentas, la cercanía del alma. Myrtha, querida amiga, te deseo ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! Se que comprendes que el abrazo que no te doy personalmente, te alcanza junto a mi permanente gratitud por contarte entre los seres especiales que dan luz a mi vida. Que este 19 de abril te traiga pétalos, sonrisas y un brindis con ese vino que tanto nos gusta aunque no mencione la marca para conservar nuestro secreto... Itatí, niña-luz, hemos compartido buenos momentos, muchas risas y complicidades. Hoy tus lágrimas por la pérdida de tu madre, me acongojan. Desde Buenos Aires, comparto tu tristeza. Estoy segura que ese ángel que cuidaste con tanto amor seguirá velando por vos y tu hermosa familia A vos, Luis Hor...